Manifiesto del YO
Soy reemplazable y verificable, cómodo, contento, confortable. Orgulloso de mi humildad, simplifico, multiplico, sumo y resto. Visionario del plástico, del peinado y el gel en los espejos. Rápido, liviano, intuitivo, calculador, discreto, ateísta, gracias a Dios; agnosticístico, creador de religiones. Vividor moribundo, caótico en el par ordenado, coma flotante, puntos suspensivos, real en la fantasía del lienzo y la pintura. Versificador sagrado de lo profano, austero en el gasto millonario. Dudo, pregunto, afirmo, acierto , soy un desacertador. Ponedor de trancas, tropezador de piedras, pecador. Altruista en el bajo profundo, alquimista, ilusionista, manipulador.
Soy estudiable, adorable, amoldable y pacificador. Vendedor de armas, de ratas, de caras y de palabras sin valor. Subo y bajo el ascensor, trepo suelos, un escalador. Digo, desdigo, repito, redigo. Internauta, cosmonauta, astronauta permitidor. De las cortinas, acomodador. Usuario de la sal, del sol, del sí y del no. Bebedor de bebidas, atendedor de exorcistas, amiga de la amiga de la amiga de la amiga...y, por sobre todo, experto PISADOR DE HORMIGAS calentón.
Este es el Manifiesto del Yo, para mí, para vos, para el YO.
Addax Plinio | Sidera visus
Comentarios
Un abrazo y feliz 10.
Carpe Diem