El problema de la Brújula en Psicología.

¿La verdadera brújula está adentro o está afuera? No hay brújulas ni caminos sin el Norte preciso.

Así como hay una Teoría del helado de limón (que es, más o menos, psicología y, mucho más, una actitud en frente de las cosas y de las personas), también está la Teoría de las líneas para el control del pensamiento (que ya forma parte de la casi pura psicología y es un modo de resolver algo) y el asunto este de todo humano que es de lo que voy a hablar ahora: el Problema de la Brújula en psicología.

Una brújula es algo que otorga orientación. Básicamente, en el desierto oscuro de una noche, una brújula señalará el Norte magnético y sabremos, a veces sin saber a dónde ir, por lo menos, por donde llegar (=P).



El hombre es la medida de todas las cosas. En palabras de Francis Bacon: "todas las percepciones, tanto de los sentidos como de la mente, son proporcionales a la medida del individuo y no a la medida del universo".

Siempre se necesitará de una brújula, si existe el norte y el mapa. Si no existiesen, no hay por qué tener brújula.

El asunto está en que el ser humano es una especie con brújula propia ─al igual que los demás seres vivos─ pero que es susceptible de ser influenciada malamente por la mente. Bueno, tal vez no "malamante", pero sí de manera inadecuada.

Digamos que alguien esté haciendo un control de su peso. Para ello, todas las semanas se dirige hacia una balanza por la cual toma unas referencias de si su pesaje es estable o inestable. Todo resulta perfecto si la balanza funciona en óptimas condiciones, es decir, si brinda un dato certero de la realidad. No obstante, el asunto se torna un inconveniente cuando no se tiene una referencia clara por el mal desempeño de la balanza.

Cuando uno tiene unos problemas que lo desestabilizan entero o la brújula no ha existido nunca, o la brújula no ha existido mucho o la brújula no ha existido bien. Entonces, uno tiene unas referencias cambiadas a la hora de acceder a los datos de la realidad. Y es posible que por ello tome unas medidas que no le lleven a los resultados deseados (al menos, desde su parte consciente de la mente).

El problema de la Brújula en psicología versa en que, siendo la mente el mejor instrumento jamás creado, potencia u oculta un problema si ella no tiende hacia la salud. Así, los mortales quedamos con el siguiente inconveniente: la misma mente que crea un problema no puede crear una solución.

¿Cómo resolver un problema con la misma mente que hizo un aporte para crearlo?. O ¿cómo resolver un asunto cuando en la mayoría de las veces se dá que la mente no sólo aporta hacia un problema, sino, que la mente es la causa de que el mismo problema exista?

He ahí el problema de la brújula en psicología...Algunos dicen que la mente debe revolucionar, cambiar para ser otra y que, por ahí, entre ese cambio y pérdida de identidades pasadas, habrá algo que tenga que ver con la salud y, por ende, con la solución. Otros, comentan que debe cada quien cuestionarse si verdaderamente existe algo llamado mente.

Por eso, muchas cosas no existen hasta que la mente las crea y muchas cosas dejarían de ser, en igual o más profunda magnitud, si la mente no existiese. Otras veces, ni la mente es el problema, sino, quien la porta...

Yo creo que cualquier cosmopólita se preguntará alguna vez acerca del Problema de la Brújula en psicología. Y creo que también cuando lo haga, sabrá un montón sobre sí mismo y a su vez, de la humanidad, porque conocerse a uno mismo es conocerlos a todos.

¡Un saludo!

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Imágenes:
http://www.astropampa.com/art-33-pluton_en_capricornio_el_tiempo_en_que_el_mundo_se.htm
http://poesiapoeta.blogspot.com/2009/03/brujula.html
http://www.reportajes.org/2007/03/31/la-brujula-ese-gran-invento/